lunes, 31 de octubre de 2011

Siete ciclistas y dos medios

Domingo, 30 de octubre de 2011.
Convocados por Gustavo a través del Twitter en el sitio de costumbre, un grupo "inestable" de liebres partimos tras la consabida espera de cortesía, rumbo a Santa Bárbara a través del Barranco del Paraíso, al que accedemos pasando por la Casa del Nene y la Famosa.
Llegados al Granillo, tomamos, unos más convencidos que otros, el camino que desemboca en la senda de bajada de la Imortal desde Santa Bárbara. Pues eso, Santa Bárbara bendita, vaya cuestarrón. Y menos mal que el terreno estaba mojado. Yo, como siempre, el último; recogiendo hinchadores y algún pulmón reventado que otro. Ciclabilidad variable  75-95%, en función de las ganas y fuerzas de cada uno.
Sin tiempo de parar en la ermita a ver cuando empezaba la misa, iniciamos el descenso por la pista de los molinos para llegar a toda mecha a Caudete (que bien se va cuesta abajo). Allí nos reunimos con tres liebres despistadas y nos liamos un almuerzo de categoría en un establecimiento local muy frecuentado por ciclistas, cuyo bocata estrella se denomina así: "ciclista", el cual hizo las delicias de los presentes, demostrando una vez más lo que mi padre siempre decía: "que los hombres se ven en el comer, y que lo demás es apaño".
Repuestas las fuerzas y tras una democrática votación, tomamos rumbo a Yecla pasando por La Toconera, donde fuimos vitoreados y jaleados con entusiasmo por un grupo de domingueros; y es que nada ni nadie se resiste al glamour y la admiración que levantamos los "Liebres Fashion-Bikers" a nuestro paso.
Llegamos a casa más o menos a las doce y media que eran la una (aún no me termino de aclarar con la hora nueva, ni con los euros). La mañana fue entretenida y la salida completó 58 km en los que predominaron pistas y caminos. En el trayecto se producirán bajas en incorporaciones cuyo resultado es un grupo de entre nueve y doce individuos de diferente pelaje y ninguno dispuesto a que otro "le moje la oreja" por lo que el ritmo se mantuvo siempre muy vivo, incluso durante el almuerzo, en el que nuestro "presi" fue el primero en dar cuenta de su "ciclista", antes incluso de que yo terminase con mi "medio".
Os dejo unas imágenes de la salida.



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