Siendo el último sábado de julio, con la playita al alcance de muchos, con el inicio de la Transalpina a la vuelta de la esquina, las cenas de "empresa" de algunos privilegiados que las tengan, las rutas maratón previstas para este pasado fin de semana y alguna que otra escusa más; con todo esto nos presentamos un reducido grupo de liebres en la fuente de los leones a la hora de costumbre en verano. Pocos pero bien avenidos.
Guiados magníficamente por los gps y siguiendo el trazado dibujado por el nuevo "Duce" de las nuevas tecnologías, nos dispusimos a pedalear rumbo a los montes del Brasil para enlazar con la desgastada subida del Factor. Pusimos rumbo al caserío del Madroño desviándonos ante de llegar al mismo para buscar el camino que lleva a las Gateras nuevas. De ahí al Caserío del Chispo y a la Casa Marta en un recorrido eminentemente pistero habitual de algunas salidas nocturnas.
Una vez llegados allí, empezó la diversión, primero y para abrir boca el tramo de subida de la Loma del Cantarero, y después, sin duda uno de los tramos más bonitos de la jornada, La Leoncia, un continuo sube y baja de terreno difícil y pedregoso que en algún momento nos requirió echar algún que otro pie a tierra. Terminado este, y en la misma zona del Calderoncillo, realizamos un corto y entretenido sendero de bajada por la zona, repetido éste de la etapa "Calderoncillo-BTT Fuente Álamo 2011".
A partir de aquí, una continua sucesión de pistas por la zona del Navazo, buscando los Cerrillares y un sitio sombrío donde poder echar un bocado. En el kilómetro 35 encontramos una pinada que nos sirve para dicho menester.
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| Foto Francis |
A partir de aquí los tramos "tipo Liebres" se sucedían: que si un pequeño bancal que parece no tener salida, que si ahora una vereda, ese camino viejo por el que no pasan ni los escarabajos, etc. Encontramos ya un camino bueno en las inmediaciones del parque eólico de las Lomas de la Tella a las que nos acercamos sin acceder a ellas. Antes hubo que reparar la cadena de la bici de Diego.
Nos acercábamos poco a poco a los Gavilanes, por la Casa de la Beata. Tras corregir un pequeño despiste comenzamos a subir la Loma de los Almendros o el camino del Pedregal, en una subida rota y, a estas horas, ya exigente. Terminado este tramo y alcanzada ya la pista del parque eólico de los Gavilanes, reagrupamos a la sombrica de unos pinos. El calor ya comienza a ser sofocante. En este punto el grupo se divide por primera vez. Cinco se van pa' casa por la vía rápida y otros cinco continuamos con la subida a la Cumbre de los Gavilanes para alcanzar la senda de bajada
Tras la senda, el trayecto habitual, Hoya Torres hasta el Calderón. En este punto nueva división del grupo entre los que se vuelven por el camino de los Picarios (con avituallamiento cerveceril secreto en el mismo Calderón), y Chinchilla y yo que realizamos los tramos de sendas I, II y III de los Picarios. Descartamos la rambla de Vera y volvemos por el tramo inicial de La Flor y el camino de la Fuente-Alamo para llegar muy sedientos a la terraza del bar La Mesa, donde nos esperan parte de los que inicialmente empezaron con nosotros.
En general una ruta entretenida, con tramos pisteros, sendas, algún bancal y mucha diversión. Digna de ser repetida en alguna ocasión, quizás con menos calor.
Datos de la ruta:
Distancia: 65,2 Km
Desnivel Acumulado: 1104 mts. (según Google Earth)
Tiempo en moviemiento: 4h 01 min.
IBP = 109 (según mi track grabado)
Por mi parte, desearos que paséis un buen verano. A los Transalpinos, que disfruten de la majestuosidad de los Alpes y que hagan muchas fotos para que nos de mucha envidia. Y a los demás pues que descanséis y no dejéis de pedalear. Los "Riopareros" nos tienen preparado un calendario intenso para el próximo inicio del otoño, así que habrá que conservar la forma.
Recordad que durante el mes de Agosto no se planificarán rutas desde el Club. Como el año pasado, se propone quedar a las 8:00 los martes, jueves y sábado, en la fuente de los Leones. La ruta se decidirá en la salida entre los que acudan
Feliz verano
2 comentarios :
El sábado pudimos disfrutar de una nutrida selección de piedras en el camino de todos los tamaños, colores y texturas. Para eso llevamos ruedas gordas ¿no?. A buen seguro, nos quedan por descubrir tantas o más de las que conocemos.
Buen relato, Juanmi. Hasta me parece sentir el calor y las moscas. Pasad buen verano, ahora ya en familia.
Muy bonita la salida del sábado a pesar del calor, sobre todo el tramo entre Casa Marta y los Gavilanes: El Cuadrado, La Leoncia, El Calderoncillo, La Tella... Un paraje poco frecuentado por nosotros y que tiene un especial atractivo y dureza.
La inesperada cerveza en la Casa del Calderón fue gloria bendita, aunque nuestro ya acostumbrado avituallamiento final tampoco se quedó muy atrás.
Que paséis todos buenas vacaciones.
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