La nocturna de todos los jueves

Ayer noche y como sigue siendo habitual salimos 14 liebres a dar un garbeo por el agrio yeclano, aprovechando (algunos) la bonanza de estas primeras noches de otoño antes de entrar en letargo hasta la próxima primavera y dejarnos a los 5 ó 6 "valientes" de siempre para que nos traguemos esas noches tan "fresquitas" que se nos presentan en pleno invierno y que a más de uno le hacen recapacitar de si salen o por el contrario hacen la ruta desde el sofá viendo águila roja.
La de anoche fue una noche algo intranquila donde su originaron algunas cosas que dieron lugar a que la marcha (siempre fluida hasta la fecha) se plagara de continuas paradas como si de un chicharra se tratase parando casi en todos los apeaderos.
Primero nuestro presidente que sigue teniendo problemas con sus luces (las de la bici) y que cuando menos se lo espera lo dejan en la más absoluta de las tinieblas, teniendo que esperarlo (por fin lo hacemos algunos) para que nos se nos pierda por esos campos de Dios.
Después se origino una pequeña escisión del grupo a la hora de elegir un camino (la 1ª vez que sucede) y que motivo una segunda parada totalmente injustificada. Al final la MAYORIA cedió a una minoría que no dio su brazo a torcer y nos encaminamos hacia una senda que ya de por si es dificultosa por la mañana pues por la noche no digamos. En lo alto de este camino se volvió a parar el grupo a fin de reagruparse nuevamente y realizar la foto de todos los jueves. Pero en ese momento aconteció lo que nadie un jueves noche desea,¡¡¡ MANOLO SE QUEDO SIN BATERIA¡¡¡. Mejor me explico, no es que Manolo pillase una pájara sino lo que es peor su máquina de fotos "peto" y nos quedamos todos posando con cara de idiota y esperando que saliese el pajarito que nunca salio.
La marcha prosiguió por unos caminos de pena y digo bien pues andábamos más pendientes de no caernos que de forzar nuestros cuerpos al máximo.
En definitiva esto es lo que opino de la marcha de ayer, seguro que alguno de vosotros discrepara y que se lo pasaría en grande, pero (y es mi opinión) las noches son peligrosas en especial por las caídas que pueden llegar en cualquier momento y que son más fáciles que se den con la luz de la luna que con la luz del sol.
Confiemos vuelva la cordura al grupo.